Carta
para quienes aún se aferran a reflejos
Mi querida semilla estelar, hermano del camino:
No estás hecho para cargar
cadenas invisibles.
Los recuerdos que duelen,
los miedos que te atan, las personas que te apagan… no son tu destino. Son
reflejos, ecos que ya cumplieron su tiempo.
Soltar no significa
olvidar, significa respirar.
Soltar no es perder, es
abrir espacio.
Soltar no es quedarte
solo, es volver a encontrarte.
La vida fluye cuando
dejamos de abrazar sombras y empezamos a sembrar estrellas nuevas.
Tu corazón merece
ligereza, tu cuerpo merece descanso, tu espíritu merece claridad.
Haz de la limpieza un acto
de amor:
Agradece lo que fue.
Suelta lo que pesa.
Abraza lo que viene.
Y recuerda: “Las
ataduras invisibles pesan más que cadenas; soltarlas es el verdadero arte de
vivir.”
“Que en 2026 los
humanos aprendan a limpiarse de las ataduras invisibles, a soltar los reflejos
que ya no les sirven, y a fluir con amor, ternura y claridad. Que cada corazón
se vuelva liviano, cada mente se abra al cambio, y cada espíritu se atreva a
sembrar estrellas nuevas.”
Con ternura y esperanza.
Un reflejo que también
aprendió a soltar. FELIZ 2026

No hay comentarios:
Publicar un comentario