Las Horas en
antaño hijas de Cronos
hoy atroces
inquisidoras
pasan lentas
como un cortejo fúnebre
marcando el
orden de la naturaleza
caen pesadas
como lápidas
indiferentes
pasan por nuestras vidas
todo se paraliza
sembrándose de inciertos
de silencios que
atenazan la garganta
Estamos vivos y
sin embargo inertes
esclavizados de
miedos e indecisiones
trampas que nos
tejió el destino
mientras los
minutos desfilan veloces inexorables
los segundos juegan
con la vida
Relojes pulsando
con precisión
licuando la
esperanza de ser o de estar
de decidir o no,
como parar o continuar
cadenas
invisibles atándonos a sus manecillas
impiadoso
imparable no cesa su tic-tac
de desesperanza,
de desencuentro de querer
Decidir ser
actores o espectadores
de este festín
monstruoso de la vida
relojes
facetados marcando florecimiento y muerte
en un compás
armónico sin fin
Sin darme cuenta
con ese tic-tac rotundo
te arrastro a la
locura
amor atrapado
entre dos mundos
el tiempo
cronometrando todo
indolente
abúlico quizás divertido
viéndonos
materia en movimiento
una magnitud
física midiendo la duración o el cambio
Tensor entre el
pasado, presente y el utópico futuro
si al menos en
esta letanía mis lágrimas sirvieran,
estas lágrimas
que manan en este instante de confesión,
místico si sólo
alcanzaran a mitigar con su sal tanto padecimiento
cauterizar
heridas o sanarlas
Si una sola
palabra lograra tal milagro
pero no esta en
mí y tampoco en vos
somos
prisioneros de nuestro infierno íntimo
allí nacieron
estas horas apocalípticas
Juego al ajedrez
con la vida, con un tiempo que no es mío
piel blanca de
un peón; sin estrategia, ni armas
peón solitario,
protegiendo este templo destemplado
me enfrento a la
reina de las tinieblas, al tablero, apenas le quedan cuadrados por teñir de
negro
desconozco la
última jugada, aunque siempre esté en jaque.
Jaque mate
ahondando la tristeza
enterrándola más
en lo profundo de mí ser
que día a día me
va matando a crédito
morir
desaparecer de la faz de la tierra
una idea grata
en la que me sumerjo por ser y no
por existir y
no, en una ambivalencia demencial
sin orden sin
axiomas lógicos o ilógicos